El MGB y el MG4 son dos de los modelos clave en los casis cien años de historia de MG. Y aunque los separan 60 años, estos dos coches revolucionarios comparten muchos atributos y transmiten a la perfección la filosofía de la legendaria marca, caracterizada por la construcción de automóviles fiables, duraderos, estilosos y con una relación calidad-precio imbatible.
En este artículo vamos a repasar algunas de las increíbles similitudes que unen al MGB y MG4 en cuanto a arquitectura, diseño, seguridad, eficiencia, rendimiento, calidad, precio, espíritu y comportamiento al volante.
Para todos
MG siempre ha conjugado en sus coches un carácter deportivo y premium a un precio ajustado. Y tanto el MGB como el MG4 transmiten a la perfección esta filosofía de MG Motors guiada por el lema “For everyone”.
Con el lanzamiento del MGB en 1962 MG democratizó el acceso a un verdadero deportivo. Incluso hoy en día, el MGB es uno de los automóviles clásicos más accesibles para los amantes de la historia de la automoción.
Seis décadas más tarde, el MG4 ha desempeñado un papel pionero similar al convertirse en el primer eléctrico premium accesible para todos, con un precio de partida por debajo de los 30.000 euros.
Superventas
El MGB es el modelo de MG más vendido de todos los tiempos. Entre 1962 y 1980 se fabricaron 523.836 unidades en sus diferentes configuraciones.
Por su parte, el MG4 tiene una historia comercial todavía breve, pero ya está cumpliendo importantes hitos. MG recibió 20.000 pedidos de su nuevo eléctrico en los tres primeros meses tras su lanzamiento.
Estructuras revolucionarias
El MGB fue el primer MG que empleó una carrocería monocasco. Eso permitió aumentar el tamaño del habitáculo y reducir la longitud total del coche.
Del mismo modo, el MG4 Electric es el primero basado en la nueva plataforma inteligente MSP («Modular Scalable Platform») de SAIC Motor, que ofrece muchas ventajas en términos de flexibilidad, aprovechamiento del espacio, seguridad y experiencia de conducción.
Diseño de alta costura
El MGB fue en su momento un diseño innovador que con el paso de los años se ha convertido en uno de los más clásicos, reconocibles y atemporales de la historia del automóvil.
En el caso del MG4, es un atractivo SUV de líneas afiladas con un llamativo capó, una zaga trasera en varios niveles y un techo bicolor aerodinámico.
Seguridad innovadora
El MGB fue uno de los primeros coches en incorporar zonas de deformación programada para proteger a los ocupantes en caso de impacto.
El MG4, que ha obtenido la máxima puntuación de cinco estrellas en las pruebas de seguridad de Euro NCAP, equipa en todas sus versiones el completo paquete MG Pilot de sistemas de asistencia a la conducción.
Eficiencia
El motor de 1.8 litros del MGB arrojaba un consumo medio aproximado de 10 litros/100 km, una cifra baja para un deportivo de su época.
Por su parte, el eficiente motor eléctrico de 150 kW (204 CV) del MG4 homologa un bajo consumo de solo 160 Wh/km en su versión Comfort.
Rendimiento y diversión al volante
Con una potencia de 95 CV y un peso inferior a los 1.000 kilos, el MGB destacaba por su aceleración. Aceleraba de 0 a 50 km/h en 3,9 segundos, de 0 a 100 km/h en 12,4 segundos, y alcanzaba 174 km/h de velocidad máxima. La versión con motor V8 hacía el 0-100 km/h en 7,7 segundos y alcanzaba 201 km/h.
El MG4 también es un coche rápido en las aceleraciones. Solo emplea 7,7 segundos para llegar a los 100 km/h. Su velocidad máxima está limitada a 160 km/h.
Calidad
Miles de unidades del MGB siguen rodando por las carreteras de medio mundo. Su sencillez mecánica y bajo mantenimiento permiten usarlo a diario como si se tratara de un coche moderno.
El MG4 también transmite calidad en todos los materiales y acabados, con un interior de diseño minimalista y tecnológico.